Soy el tigre. Te acecho entre las hojas anchas como lingotes de mineral mojado. El río blanco crece bajo la niebla. Llegas. Desnuda te sumerges. Espero. Entonces en un salto de fuego, sangre, dientes, de un zarpazo derribo tu pecho, tus caderas. Bebo tu sangre, rompo tus miembros uno a uno ... | ... Y me quedo velando por años en la selva tus huesos, tu ceniza, inmóvil, lejos del odio y de la cólera, desarmado en tu muerte, cruzado por las lianas, inmóvil, lejos del odio y de la cólera, desarmado en tu muerte, cruzado por las lianas, inmóvil en la lluvia, centinela implacable de mi amor asesino. |
Pablo Neruda / Poemas del Alma
Visto en: Una sobremesa con niño en Casa Vallecas - Berlanga de Duero (via GoogleMaps)
Me viene a la mente algo más castizo y la vez menos poético...
ResponderEliminarTú lo que quieres
que me coma el tigre
mi carne morena
Tú lo que quieres
que me coma el tigre
mi carne está buena..
Siento romper el clima de ternura y prosopeyismo que inunda este post...
saludos y abrazo
No creas, que a mi tambien me rondaba la cabeza cuando hice el post... pero bastante mérito tenía mezclar a Pink Floyd, Berlanga de Duero y Neruda en un solo texto, como para dejarme llevar. ;-)
ResponderEliminarPor cierto, tengo ya un ejemplar del libro de las obras de teatro radiofónico para ti... Un día que podamos, quedamos.
ResponderEliminarChao, pescao