"Primero te ignoran,
después se ríen de ti,
luego te atacan,
entonces ganas."
"Humildemente me esforzaré en amar, en decir la verdad, en ser honesto y puro, en no poseer nada que no me sea necesario, en ganarme el sueldo con el trabajo, en estar atento siempre a lo que como y bebo, en no tener nunca miedo, en respetar las creencias de los demás, en buscar siempre lo mejor para todos, en ser un hermano para todos mis hermanos."
Mientras busco inspiración para contar mi opinion sobre mi primera visita a la Ciudad de la Cultura de Galicia pongo esto para ir abriendo boca.
En una de las salas hay una exposición sobre el propio proyecto. Gracias a Dios es una exposición temporal, aunque (si nos olvidamos del coste) sería filosóficamente interesante/irónico que el discutido contenido de la obra fuera simplemente una exposición para explicar la obra en si misma. Como un libro cuyo texto fuera una descripción de la encuadernación, o esos telediarios que no son mas que autopromoción de la propia cadena de TV ...
[ustedes perdonen, es ya tarde, uno viene cansado y empieza a delirar]
Pues bien al final de esa sala, sobre una especie de altar, hay una gran pantalla en la que una grabación del arquitecto Eisenman, a modo de Gran Hermano de Orwell, o de malvado de Spectra en una película de James Bond, explica en infinito bucle la filosofía y la metafísica del proyecto.
Nunca he sido muy fan de esa especie de arquitectos sagrados que son capaces de explicar el diseño de una nave industrial como si fuera un anuncio de esos de "a que huelen las nubes". Pese a ello, la sensacion causada por encontrarme a solas en la sala con un gigantesco arquitecto con pajarita roja que habla de iconos e interpretaciones místicas fue muy desasosegante.
Sonríes para que tu retrato sonría alli donde quiera que vaya. Para que lo haga incluso cuando ya no estes aquí.
Pero sonríes tratando que no se sepa lo que piensas. Para que ese retrato no lo vaya diciendolo por ahí, y menos cuando ya no estés.
En estos tiempos tu sonrisa forzada puede llegar en minutos donde tu nunca hayas estado. En estos tiempos tu sonrisa forzada puede multiplicarse y cubrir espacios enormes.
Ahora lejos de ser su dueño, eres el esclavo de esa sonrisa.
Visto en: Portada de Esquire con Jack Nicholson en kiosko de la T4 de Barajas - Madrid
[aviso: Si hay entre los presentes alguien sensible al maniqueísmo se le recomienda abandonar el post por la parte final.]
Lo cierto es que esta semana me ha venido marcada con dos hechos relativos a Bibliotecas, lugares que siempre han sido de mi predilección. Mi enredada cabeza no ha podido por más que relacionar uno con el otro y aqui contrapongo los dos para su conocimiento:
- Supe que el gran Javier Sanz (@jsanz autor de Historias de la Historia) abandera elproyecto "Letras en el Sahara" para ayudar a dotar de biblioteca al pueblo de Samara en el Sáhara. Hasta ahora han ido levantando unos muros de adobe (1€ = 7adobes) y ahora necesitan apoyo para rematar la obra y recibir donaciones de libros para llenarla.
- Hice mi primera visita la recientemente inaugurada Bilioteca de Galicia, uno de los dos edificios ya en uso de la mastodóntica Ciudad de la Cultura de Santiago de Compostela. La Biblioteca posee por si sola unos 16.000 m2 útiles en un descomunal volumen edificado. De esta visita, este lugar y las sensaciones que me produjo escribiré un post cuando sea capaz de hacerlo con la calma y el sosiego necesarios. Dado su tamaño y reciente apertura, todavía hay muchas de sus estanterías de diseño que están vacías asi que seguro que tambien aceptan de buen grado sus donaciones.
§ 316. El lujo y la demasiada civilidad en los estados son el presagio seguro de su decadencia; porqué como todos los particulares se aplican á sus intereses propios, abandonan el bien público.
Ponme en el yunque, Oh Dios. Golpéame y martilleame hasta ser un clavo de acero. Méteme en las vigas que juntas sostienen un rascacielos. Toma remaches al rojo y úneme a los pilares centrales. Haz que sea el gran clavo que sujeta al rascacielos a través de las noches azules hasta las blancas estrellas.
... Pero es preciso no hacer responsables a las máquinas de las crisis y de los excesos de producción ocasionados, ya por la fiebre de las especulaciones, ya por una mala legislación de aduanas, ya por la impericia de los empresarios, en suma, por la ignorancia ...