jueves, julio 10, 2008

El viento (Cuento)

[ El viento despertó en la cima de la montaña y bajo a buscar al mar ]
Despierta, hermano!, -bramó el viento- ¡Aquí estoy!
-¿Por qué vienes a turbar mi reposo? -preguntó el Océano.
-Quiero jugar contigo. Despierta.
Y para desperezarle, el viento le sacudió con sus robustos brazos. El mar se entregó al viento, que le levantó hasta las nubes y le dejó caer con estrépito; luego bajó a cogerle al fondo del abismo, y como locos saltaron, corrieron, brincaron; bramando, silbando y rugiendo.
-¿Dónde está el rayo? -exclamó el viento.- ¡Me gusta jugar contigo, oh mar, cuando su luz siniestra enrojece las nubes!
-Aquí estoy, - exclamó con acento metálico.

-¿Quién habla?
-Yo.
-¿Quién eres?

-El telégrafo.
-¿Qué tiene que ver el telégrafo con el rayo?
-El hombre me ha sujetado a este alambre y ha aprovechado mi velocidad para suprimir el espacio.
El viento soltó una carcajada. Al oírla, las ballenas y los tiburones se espantaron y huyeron hacia el polo.

-¡Sólo falta, -dijo el viento-, que el hombre suba a las nubes y te aprisione!
-Ya lo ha hecho. Pone el pararrayos encima de su morada y a él me tiene encadenado.
-¡Necio! Te creía más fuerte. ¡Nubes: abríos y azotad la casa del hombre! ¿Dónde estáis?
-¡Aquí! -contestó una voz estridente.
-¿Quién habla?
-La locomotora.
-¿Qué tiene que ver la locomotora con las nubes?
-Las tengo aprisionadas en mi seno. En vez de flotar en el espacio, se retuercen dentro de las paredes de mi caldera, y convertidas en fuerza arrastran los trenes y suprimen las distancias.
-¿Quién ha podido tanto?
-El hombre.
-¡Mar! -bramó el viento- tú no te dejas aprisionar como el rayo y las nubes.
-Yo tenía un secreto, -dijo el mar- tenía abrazado un mundo y le escondía a todas las miradas. El hombre lo adivinó y un débil leño bastole para arrebatármelo.
-¿Qué es el hombre?

-El que a ti te domina.
-¡A mí! -rugió el viento. Y en su cólera sacudió las aguas, que se convirtieron en montañas.
-A ti, -añadió el mar-, pues te obliga a mover las aspas de un molino y a hinchar las velas de un buque.
-¿Quién ha dado su poder al hombre?
-El que me puso por valla a mí, infinitamente grande, el grano de arena, que es lo infinitamente pequeño: Dios.
-¿Qué tiene el hombre que le hace superior a nosotros?
-El alma, reflejo de la divinidad. He aquí porque aprisiona el rayo y el vapor; he aquí porque también a ti te encadena y porque sorprende mis secretos, me arrebata un mundo y me obliga a sostenerle cuando me cruza, azotándome con la hélice; he aquí porque te fuerza a ti a empujarle hinchando las velas de sus buques.
----- Teodoro Baró - Cuentos del Hogar - 1883 -----
(Via Wikisource)


P.D. ... ahora el mar le diría al viento: ¡¡ Si hasta eres objeto de concesión!!

Visto en: Parque Eólico do Forgoselo - A Coruña (Vía Google Maps)

BSO: ahí van unas pocas delicias "venteadas" (via Songza)
  1. Blowin' in the Wind - Bob Dylan
  2. Catch the Wind - Donovan
  3. Dust in the Wind - Kansas
  4. The Wind Cries Mary - Jimmy Hendrix
  5. Hickory Wind - Gram Parsons

2 comentarios:

  1. Era pecado que esta entrada tan bella no tuviera comentarios... Gracias.

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  2. Gracias a Usted Sr. HombredHojalata.

    La heterogeneidad caracteristica de este cajon de sastre hace que se lea sobre prosecutivos junto a poemas de borges y se cite al licor de merda junto a visitas a la ONU...

    ¡ que mundo este !

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