Segundo ejemplo práctico de nuestras lecciones de marketing para hosteleros.
Despues del
"licor de merda" tenemos una manera de llamar la atención para un producto que a mi gusto no hacía falta ponerle ni nombre para que chuparse los dedos. Es más, creo que desde que vi ese cartel, no soporto la empanada de bonito. :-).
Visto en: Santiago de Compostela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario